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Amor incondicional
por un Hopi
Eres único, diferente de todos los otros. Sin reserva ni duda,
permito que estés en el mundo como eres/estás sin un
pensamiento o palabra de juicio. No veo error alguno en las cosas
que puedas decir y hacer, sentir y creer, porque entiendo que te estás
honrando a ti mismo al ser y hacer lo que es verdad para ti. No puedo
recorrer la vida con tus ojos ni verla a través de tu corazón.
No he estado donde tú has estado, ni experimentado lo que tú
has experimentado, viendo la vida desde tu perspectiva única.
Te aprecio exactamente como eres, siendo tu propia y singular chispa
de la Conciencia Infinita, buscando encontrar tu propia forma individual
de relacionarte con el mundo. Sin reserva ni duda, te permito cada
elección para que aprendas de la forma que te parezca apropiada.
Es vital que seas tu propia persona y no alguien que yo u otros
piensen que “deberías” ser. En la medida de mi
capacidad, sin denigrarme o ponerme en un compromiso, te apoyaré
en eso.
No puedo saber lo que es lo mejor para ti, lo que es verdad para
ti o lo que necesitas porque no se lo que has elegido aprender,
cómo has elegido aprenderlo, con quién, ni en qué
periodo de tiempo. Solo tú puedes sentir tu excitación
interna y escuchar tu voz interna – yo solo tengo la mía.
Reconozco que, aunque sean diferentes entre si, todas las maneras
de percibir y experimentar las diferentes facetas de nuestro mundo
son válidas. Sin reserva ni duda admito las elecciones que
hagas en cada momento. No emito juicio sobre esto porque es imprescindible
que honre tu derecho a tu evolución individual, porque esto
da poder a ese derecho para mí y todo el resto.
A aquellos que elegirían un camino que no puedo andar o que
no andaría, y aunque elija no añadir mi poder y mi
energía a ese camino, nunca te negaré el regalo de
amor que Dios me ha concedido para toda la creación. Así
como te amo, seré amado. Como siembro, así recogeré.
Sin reserva ni duda, te permito el derecho universal de libre albedrío
para andar tu propio camino, creando etapas o manteniéndote
quieto cuando sientas que es apropiado para ti. No puedo ver siempre
el cuadro más amplio del Orden Divino y no emitiré
juicio sobre si tus pasos son grandes o pequeños, ligeros
o pesados o si conducen hacia arriba o hacia abajo, porque esto
solo sería mi punto de vista. Aunque vea que no haces nada
y juzgue que esto es indigno, yo reconozco que puede que seas el
que traiga una gran sanación al permanecer en calma, bendecido
por la Luz de Dios.
Porque es el derecho inalienable de toda vida el elegir su propia
evolución, y sin reserva ni duda reconozco tu derecho a determinar
tu propio futuro. Con humildad, me postro ante la comprensión
de que el camino que veo que es mejor para mi, no significa que
sea también correcto para ti. Lo que yo creo no es necesariamente
verdad para ti. Sé que eres conducido como yo lo soy, que
sigues tu excitación interna para conocer tu propio camino.
Sé que las muchas razas, religiones, costumbres, nacionalidades
y creencias en nuestro mundo nos traen una gran riqueza y nos procuran
los beneficios y enseñanzas de tal diversidad. Sé
que aprendemos en nuestra manera única para devolver ese
amor y sabiduría al Todo. Entiendo que si sólo hubiese
una forma de hacer algo, sólo necesitaría haber una
persona.
Apreciaré tu luz interior única, te comportes o no
en la manera en la que considero que deberías, o creas en
las cosas que yo creo. Entiendo que eres verdaderamente mi hermano
y mi hermana, aunque hayas nacido en un lugar diferente y creas
en diferentes ideales.
El amor que siento es por absolutamente todo lo que existe. Sé
que cada cosa viva es una parte de una conciencia y siento un amor
profundo por cada persona, animal, árbol, piedra y flor,
cada pájaro, río y océano y por todo lo que
existe en todo el mundo.
Vivo mi vida en servicio amoroso, siendo el mejor Yo que pueda,
haciéndome más sabio en la perfección de la
Verdad Divina, haciéndome más feliz, más sano,
y cada vez más abundante y gozoso.
Aunque a lo largo del camino me gustes, sienta indiferencia por
ti o me disgustes, no voy a dejar de amarte, de honrar tu singularidad
y de permitirte ser tú. Esta es la llave de la paz y armonía
en nuestras vidas y alrededor de nuestra Tierra. Este es el broche
del Amor Incondicional.
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