La propiedad privada y las mafias de la privatización ante el cambio de ciclo y el Nuevo Paradigma humano
La esclavitud como forma de propiedad privada
La historia nos enseña que no podemos clasificar las conductas de una manera absoluta entre buenas o malas. La esclavitud por ejemplo, que en nuestros días la inmensa mayoría de las personas coincidirían en calificar como de práctica deplorable e inhumana. Sin embargo, en sus inicios representó una solución revolucionaria al conflicto generado por un gran cambio de paradigma social para aquella época: la transición de la forma de vida nómada al nuevo paradigma de la vida sedentaria. Las luchas entre nómadas y sedentarios por alimentos por los que todos ellos creían tener derecho, terminaban con la muerte de unos u otros. Así pues, cuando los primeros grupos pobladores sedentarios empezaron a perdonar la vida a los nómadas vencidos a cambio de techo y comida, y obligándoles a adaptarse al estilo de vida sedentario, nació la esclavitud. Para los sedentarios era mas inteligente integrar a los vencidos dándoles alimento y cobijo que matarlos. De esta forma los convertían en sedentarios y se hacían mas fuertes para defender sus “propiedades” frente a los nómadas todavía no convertidos en sedentarios. Ese proceder también supuso el nacimiento de la propiedad privada, tanto sobre las cosas como sobre los propios seres humanos.
Desde el punto de vista de la conciencia de quienes realmente somos y de a que cosa pertenecemos, la historia de la evolución humana se compone de avances y retrocesos. La abolición formal de la esclavitud ha sido pues un avance y al mismo tiempo un engaño. Un avance porque se postulaba que ningún ser humano podía pertenecer a otro, y eso planteaba, en teoría, el fin de la propiedad privada sobre seres humanos. Y también ha sido un engaño en el sentido de que nacieron alternativas sociales para conseguir el mismo resultado evitando que se le llamara esclavitud. El trabajo asalariado y el capitalismo han sido la forma de sofisticar la esclavitud para que los esclavos se sientan libres en una sociedad falsamente democrática. Cuando un pueblo no depende de si mismo, ni es libre ni existe democracia. Lo mismo podemos decir del individuo y de su libertad de conciencia.
La historia censurada de nuestra Alta Edad Media
Entre los avances y retrocesos de nuestra evolución se encuentran los logros que conseguimos durante el periodo de la alta edad media (1). Al contrario de lo que nos han enseñado en la escuela, fue una época floreciente. La democracia, sostenida por el autogobierno de pueblo, permitió el desarrollo de una sociedad con unos valores humanos mucho mas avanzados de los que han venido prevaleciendo posteriormente y hasta la fecha. Pero la historia ha sido intencionadamente alterada y manipulada para que los libros de texto escondan lo que sucedió realmente en este periodo en España.
Fue precisamente durante esta época dorada de la historia en España cuando más se compartió, convirtiéndose la propiedad privada en la menor expresión conocida. Las tierras pertenecían a la comunidad y la explotación de las mismas era rotatoria entre sus habitantes. Las decisiones se tomaban conjuntamente en asambleas.
Sin embargo, algo ocurrió a partir del siglo XIV que determinó el final de un avance y el inicio de un retroceso en nuestra evolución, y que se ha mantenido hasta la actualidad. Ese giro en la evolución humana, como sociedad, sigue siendo un misterio para los historiadores que han estudiado seriamente esta época; pero para quienes hemos estado juntando información sin menospreciar las fuentes, pero sometiéndola a la presión de una rigurosa verificación y con análisis comparativos entre ellas, podemos deducir que ese giro ha sido el fruto de un gran plan secreto a largo plazo realizado y ejecutado por los llamados sabios de Sión y sus descendientes herederos.
En este breve ensayo sólo vamos a tocar uno de estos aspectos de este retroceso, el del resurgimiento de la propiedad privada y, recientemente, el nacimiento de la propiedad intelectual.
La propiedad privada
El concepto de propiedad privada es un concepto perverso en el sentido de que pretende escapar de las leyes del universo. Aunque sólo parece conseguirse parcialmente y durante un periodo de tiempo limitado en nuestro planeta. Se consigue parcialmente porque todo lo que un ser humano dice que posee materialmente no se lo puede llevar a ninguna parte cuando abandona su encarnación temporal. Pero si pudieran lo intentarían. La razón es que todavía no se han dado cuenta de que no les conviene intentar violar esas leyes universales.
En la naturaleza no existe la propiedad. Ni siquiera nuestro cuerpo físico nos pertenece. Lo tenemos en usufructo para utilizarlo como vehículo mientras estemos aquí. La pretensión de registrar como propiedad privada una idea o una creación intelectual, nos da una idea de hasta que punto algunas sociedades humanas se ha alejado de la naturaleza y de sus leyes universales.
Estamos hablando de la misma locura que ha permitido a multinacionales como Monsanto patentar la genética de especies vegetales. Si Dios no lo ha hecho, ¿porqué Monsanto creerá tener derecho a hacerlo? Es una pregunta retórica sin duda, ellos saben que no lo tienen, pero hasta la fecha su particular moral se lo permite sin ningún problema. En realidad todo esto es un burdo pretexto intelectual para robar y someter descaradamente a sus semejantes.
Lo mismo podemos decir de cualquier clase de propiedad. La propiedad privada consiste en reclamar un supuesto derecho antinatural para poder obtener un beneficio a costa de otros. Se trata de un concepto agresivo contra la libertad de aquellos que son ajenos a las mafias de la propiedad. Pretenden justificar sus actos intentando criminalizar a quienes se resisten a pagar sus impuestos. Por utilizar una planta silvestre, por hacer uso del agua, por cantar o compartir una canción, por recitar un poema... y quizá pronto por respirar el aire.
¿Quienes son los piratas?
Criminalizan a sus semejantes acusándoles de piratas. Buena ironía. Acusan justamente de lo que están haciendo ellos. Al patentar o registrar una idea como propia están pirateando a la naturaleza, se están pirateando a ellos mismos, ya que nos están pirateando a todos. Y luego volverán a intentar hacerlo cuando pretendan cobrar por el uso de esas ideas o cosas. Doblemente pirateados por esas mafias.
Pero en realidad estamos siendo tres, cuatro o muchas mas veces pirateados. Para rizar el rizo, y haciendo alarde de gran inspiración y creatividad, logran imponer un “canon” por la adquisición y uso de soportes que permiten reproducir texto, imagen y sonido. Le llaman “canon” pero no es más que un impuesto que se paga directamente a la mafia y del cual el Estado recibirá su IVA.
Aquí vemos claramente como este Estado, que en el caso de la mayoría de países no nos pertenece al pueblo, está directamente implicado y al servicio de esas mafias, del mismo modo que lo está de las corporaciones financieras y del Banco Mundial.
Y después de la acusación practican el acoso. La ironía es que al acoso lo llaman “persecución a la piratería”. Todo forma parte del sucio negocio al que llaman gestión de derechos. Negocio gracias al cual no sólo nos roban económicamente mediante impuestos, sino que también están coartando nuestra libertad natural, inherente a todo ser humano, de compartir y comunicarnos.
Ante las puertas del Nuevo Paradigma
Pero ahora estamos ante las puertas de un nuevo paradigma. Consiste en compartir, enseñar, colaborar. La energía predominante va a ser la del amor. Potenciar el servicio a los demás por encima del servicio a uno mismo.
No nos consideramos los propietarios intelectuales de nada de lo aquí expuesto. Todos lo somos compartiendo la misma información. La creatividad consiste en escoger fragmentos de información y combinarlos y marearlos hasta hacerles decir lo que queremos expresar. Pero todo ello ya existe desde antes de haberlo procesado mentalmente. Darse cuenta de ello significa saber que los “autores” nunca han existido.
Cuando un pájaro canta está haciendo lo mismo que nosotros cuando decimos que estamos creando algo. Pero ningún pájaro se ha declarado nunca autor de su piar. Algunos seres humanos se han ido alejando tanto de su propia esencia que ello les ha permitido auto-proclamarse dueños de ideas y de información, otorgándose el derecho de apropiarse de esas ideas y de esa información como suyas.
Lo que la nueva era que iniciamos en este cambio de ciclo nos depara, es la sabiduría de reconocer que la propiedad privada es antinatural y contraria a las leyes del universo.
La propiedad privada no pertenece al Nuevo Paradigma.
(1) "La democracia y el triunfo del Estado", "Naturaleza Ruralidad y Civilización", "El giro estatolátrico" (de Félix Rodrigo Mora)
Equipo de free-news.org
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